Normalmente la planeación de tu día de trabajo ocurre como lo tienes establecido. Te levantas a cierta hora, te preparas, trasladas a la oficina, trabajas y de regreso a casa. Un típico día, igual que ayer. Y así por mucho tiempo.

Pero te haz preguntado ¿así tiene que ser?, ¿solo yo tengo esta rutina?. Si  no haces ciertos cambios, terminarás acostumbrando a ese ritmo de vida, y también se va acabando el entusiasmo, las ganas de hacer algo diferente. Para evitar caer en la tradicional rutina laboral, te comparto estos cinco consejos:

Aliméntate sanamente. Y no me refiero solamente a disfrutar de alimentación balanceada, que brinde a tu cuerpo la “gasolina” necesaria para hacer tu día, me refiero a lo que alimenta tus pensamientos, ya que vivimos en una era del consumo electrónico de información a través de redes sociales que satura nuestro conocimiento necesario, nos vamos convirtiendo en una sociedad fría que ha cambiado el contacto físico por el virtual. Te hago una pregunta: en tu pasado cumpleaños, de tus amigos en facebook ¿cuantos te llamaron por teléfono? Te aseguro que ni el 10 porciento. Nos limitamos a poner un “like” a tu foto de tu celebración de cumpleaños y con eso nos sentimos “presentes”.        

Piensa positivo. Nos rige la ley de atracción, atraemos lo que pensamos. Te sugiero ser selectivo en los programas de televisión que ves, en especial los noticieros,  donde predominan noticias negativas que van contaminando tu versión de la vida, y se rijen de la premisa “ las noticias buenas no venden” y es cierto, te pregunto, ¿Cuándo fue la última vez que viste un encabezado positivo en el periódico? Hablo de la inauguración de un hospital, remodelación de escuelas, etc. Yo no lo recuerdo.

Convive con personas que tienen ganas de vivir. Hay zombies en las empresas, que llegan a las 8 AM esperando que sean las 6 PM para regresar a su aburrida vida en casa. Son aquellos que contaminan cualquier noticia convirtiéndola en negativa, son fáciles de identificar ya que se quejan de la comida, del clima, del tráfico; cuando llega un nuevo empleado le empiezan a decir que en la empresa no hay oportunidades, te hubieras quedado donde estabas, etc. Son aquellos que te marcan por teléfono y no les quieres contestar. ¿Sabes que es lo peor? Que la negatividad y mala suerte se pegan. Aléjalos de tu vida.

Inicia el hábito de realizar ejercicio. Piensa esto. Habitamos en un cuerpo que parece que estamos peleados con él, por como lo tratamos con la alimentación, bebidas, azúcares, colorantes artificiales y demás. Además date cuenta que la gran mayoría de la población no hace ejercicio. Las enfermedades crónico-degenerativas son las principales causas de muerte en el planeta, empezando por la diebetes. Nos han hecho creer que estas enfermedades o la obesidad son hereditarias, por ejemplo: estoy gordito, porque así es mi familia. Mentira. Estas gordo por lo que comes, eres lo que comes. Lo alarmante es que no fuimos diseñados para vivir 90 años como lo hacemos ahora, ya que no se ha encontrado un fósil macho del Homo Sapiens mayor a 30 años; nuestros órganos no estan diseñados para vivir casi cien años; así que apartir de los 30 años a cambiar la dieta, hacer ejercicio, agrega vida a los años, no años a la vida. Comienza hoy por convicción ó mañana por prescripción (médica). Le escuche una vez a un médico decir, hasta los 20 años tienes el cuerpo que Dios te dió, a partir de los 20 años tienes el que cuerpo que te mereces. Somos el reflejo de nuestros hábitos.

Realiza el trabajo que te apasiona. Finalmente,de tu ocupación actual ¿estarías dispuesto a hacerlo los siguientes años?, ¿hasta tu jubilación? De no ser así, ¿que plan tienes? O solo verás pasar el tiempo. Cámbiate al asiento del piloto y deja de ser observador de tu propia vida, ya que si tu no cumples tu sueños, otra persona te contratará para que logres los suyos.

Esta es la nueva ruta del empleo.